
El día, mi día empieza cuando sonó el timbre de su casa, caminando por las calles de aquel pueblo que se pone ya de moda, intercambiamos saludos con alguien que ha sido probablemente el conecte entre todo esto, si, analicemos esto, si en la prepa yo no me hubiera acercado a decirle –hola ¿te puedo raptar?- no habría tenido contacto con el jamás, y si a él no le hubiera hecho caso de hacer un blog, nunca nos habríamos enterado de la existencia de uno ni del otro… bien un hola breve platica y un hasta luego. En el banco de colores azul y blanco, lo veía solo lo veía hacer tramites y volví a enseñarle la lengua, si como aquella primera vez lo hice en el mismo banco solo que en otra sucursal, esta vez no hubo gesto alguno al contrario hubo respuesta, mientras el firmaba y firmaba yo pensaba: si, lo amo debería de darle un beso en este preciso momento, y decirle a ese tipo que lo hace firmar y firmar, quítese de aquí porque me estorba. Jaja si eso debí haber hecho, pues luego parece que ahí en ese lugar es fácil encontrarte a todo mundo, conocí a un chico de poco cabello que se veía muy feliz y con muchos ánimos ja tenia un tatoo bien loco, subimos a el camión que vibraba demasiado y el paisaje nunca cambiaba y sus labios tampoco, llegamos y tomamos el buen colectivo, por cierto nos bajamos sin pagar y el reclamo fue para alguien mas jaja… caminando entre las calles tuzas, muy amable la gente eh!! Uy si… ahora todo era claro para mi.