Flores Sobre Las Piedras

Me acuerdo cuando empecé a leer tu blog, encontré un post que decía algo así “Que tus palabras sean dulces por si tienes que tragártelas”… ¿pequeño consuelo no? El trago no me será tan amargo. Casi a un año de tu visita por primera vez a mi blog, tantas cosas, tantas coincidencias, cuantas emociones y miles de vivencias, es imposible seguir escribiendo esto sin poder evitar derramar una lagrima, sin sentir dolor. Porque aunque no lo creas me duele, duele alejarte de la persona que te hizo volver a creer en el amor, duele dejarla porque es lo mejor.
Sabes… el ultimo disco de austin se parece tanto a ti, que mientras escribo esto lo escucho. En este final no hay culpables, solo es el resultado de nuestras acciones, probablemente llegues a pensar “yo hice tal cosa por ti, deje tantas cosas por ti…” no es el hecho de lo que hallamos dejado o hecho uno por el otro, mas bien lo que nos dejamos de hacer para remplazarlo por momentos tontos, vacíos e innecesarios. No me juzgues por mi decisión, por lo malo que hice, acuérdate de mi por lo lindo que esto fue. Porque cuando yo dije -solo quiero un chico que me quiera, comparta cosas conmigo, levante la voz para decir aquí estoy y que me haga el favor de robarme el sueño- ese niño fuiste tu. Ya se que rompí promesas que hice después de tantos momentos buenos, yo se que no soy la mejor, y que ahora no creas ni la mitad de lo que estoy diciendo pero solo cuento mi versión; lastimarte así nunca fue mi intención.
Gracias, por leerme, no solo gracias ti amor, gracias también a ti lector que tomaste un poco de tu tiempo y leíste lo que pasaba a mi alrededor, así como se cierran las paginas de un libro yo cierro hoy este blog; cuídate… encontrarte aquí fue de lo mejor.